Una cometa submarina atrapará la energía del mar

Si alguna vez has volado una cometa en un día de viento, habrás comprobado los esfuerzos ímprobos necesarios para evitar que escape y cobre vida propia. Pues bien, una compañía ha trasladado ese principio al mundo submarino para crear una central mareomotriz con formato de cometa. Es decir, un dispositivo capaz de generar energía del mar a partir de las mareas y las corrientes submarinas. Existen numerosos proyectos que tratan de sacar partido de esta energía renovable, pero son pocos los que están ya operando a escala comercial. La cometa submarina que acaba de empezar a operar en las islas Feroe es una de ellas.

Obtener energía del mar con una cometa de mareas

En realidad, el dispositivo desarrollado por una compañía sueca se parece más a un avión submarino que a una cometa. Tampoco muestra precisamente la ligereza de una cometa, ya que pesa unas veintiocho toneladas y ofrece una envergadura de doce metros. Sin embargo, Dragon 12, tal como se ha bautizado a esta nueva máquina, sí que podría calificarse de cometa en la medida en que se encuentra anclada al suelo marino con un largo cable de sujeción. La cometa de mareas está compuesta de un ala principal, un timón, unas hélices elevadoras, un sistema de engranajes, una turbina y el generador eléctrico. Pero ¿cómo obtiene la energía del mar exactamente?

Tal como hemos apuntado al comienzo, la cometa genera electricidad a partir de corrientes marinas y mareas mediante un principio similar al vuelo de una cometa al viento. El ala principal aprovecha la fuerza de elevación hidrodinámica creada por la corriente submarina para mover la cometa, que se dirige autónomamente en una trayectoria predeterminada en forma de ocho, arrastrando la turbina a través del agua a una velocidad varias veces superior a la velocidad real de la corriente, tal como una cometa se acelera al moverla lateralmente.

La turbina activa entonces un generador que produce electricidad, transmitida a la red eléctrica a través de un cable de alimentación. La cometa cuenta, además, con un sistema de control autónomo integrado, lo que le permite operar en cualquier condición sin necesidad de asistencia humana.

La ubicación elegida es un canal entre dos de las islas Feroe, donde aprovecha la corriente submarina generada por las mareas. Esta pasa por una turbina central y genera hasta 1,2 MWh, suficiente para abastecer de energía renovable a una cifra aproximada de mil hogares. Una de las ventajas de esta energía del mar es que se beneficia del carácter constante de las mareas. Según los desarrolladores de la cometa, el coste es inferior a otros proyectos de energía mareomotriz, ya que requiere muchas menos infraestructuras.

¿Qué es la energía del mar y qué tipos hay?

Es un recurso energético que se puede obtener de los océanos a través de tecnologías cinéticas, térmicas o moleculares. De forma resumida, estos son los principales tipos de energía que se pueden obtener de las masas oceánicas del planeta, cada uno ellos con su potencial para contribuir al mapa de la energía renovable mundial de manera más o menos significativa:

• Energía mareomotriz: Aprovecha las mareas para generar electricidad mediante turbinas, siendo fiable pero geográficamente limitada.
• Energía undimotriz: Utiliza el movimiento de las olas para producir energía, con un amplio potencial gracias a la constante actividad oceánica.
• Energía térmica de los océanos: Conocida también como OTEC, se basa en la diferencia de temperatura entre aguas superficiales cálidas y profundas frías para generar energía, lo que la hace idónea para regiones tropicales.
• Energía salina: Explora la diferencia de salinidad entre agua de mar y el agua dulce en la desembocadura de los ríos para generar electricidad. Aún en se encuentra en fase experimental.

Por supuesto, aunque técnicamente no se considere una energía del mar, en este medio también encontramos la energía eólica offshore que por ahora es la solución más eficiente. Si quieres conocer otras fuentes de energía renovable y sostenible, no dudes en suscribirte a nuestra newsletter al final de esta página.

Fuentes:

• New Atlas

Imágenes

• Minesto